Aprobada una nueva Ley de Personal de la Guardia Civil para el 1% del personal.

Llevamos más de un año hablando de la necesidad de reformar la Ley de Personal del Cuerpo. Sin embargo, como todos sabemos, ha habido una oposición feroz por parte de la Escala Superior de Oficiales y de la Cúpula de la Guardia Civil, los Generales; porque la reforma suponía, a la postre, una merma de sus privilegios. Por ello la reforma se ha acabado efectuando, como era de esperar, sin sacar una nueva Ley, a golpe de Real Decreto.

La nueva Ley de Personal era una necesidad impuesta por la pertenencia a la Unión Europea. Se trataba de adaptar la carrera profesional de los Guardias Civiles al nuevo Espacio Europeo de Educación. Pues bien para la Escala Superior de Oficiales esto se ha hecho, porque se han adherido a la Ley de la Carrera Militar a través de la futura convocatoria para la Academia de Zaragoza. En adelante sus titulaciones será las previstas en esa Ley de Carrera Militar, aunque en la ley de Personal del Cuerpo no estén insertas las nuevas titulaciones que se les proporcionarán vía F.A.S. Para el resto de la Guardia Civil, el 99 %, no se ha producido reforma.

Se ha aprobado, también vía Real Decreto, un Centro Universitario que sólo sirve a la Escala Superior de Oficiales, mientras que en el borrador de la Ley de Personal del Cuerpo se contemplaba como un centro de formación para las necesidades del Cuerpo, es decir, para todos los miembros de la Guardia Civil.

Otras reformas que se preveían en la ley también se han aprobado por la misma vía. Así, se ha aprobado vía R. Decreto la opcionalidad de diferir el pase a la reserva entre 2 y 4 años, esa opcionalidad estaba prevista en el borrador de la Ley de Personal, ahora, con la vía del R. Decreto en cualquier momento se puede eliminar la posibilidad de hacerlo voluntariamente para hacerlo obligatoriamente.

Como se sabe el R. Decreto es una vía legislativa que atiende en gran medida a la celeridad de cambios legislativos y se ha empleado correctamente, los únicos cambios legislativos que corrían prisa eran los que afectaban a la Escala Superior de Oficiales. Las necesidades de eficacia y modernización del Cuerpo que es lo que subyace en la nueva ley de personal no corren prisa, los cambios que buscan superar auténticas aberraciones, como la de un catálogo de puestos de trabajo donde no se especifican las funciones que ha de realizar el personal adscrito y sólo sirve para adjudicar, de forma completamente arbitraria y sobre el empleo como único baremo, los complementos específicos singulares,… tampoco corre prisa.

Lo que no han reparado quienes han permitido esta reforma encubierta es que hemos vuelto al post-franquismo: la cúpula de la Guardia Civil está formada por personal que son antes miembros de las FAS que funcionarios policiales.

De cualquier forma, hay una nueva ley (encubierta) de personal de la Guardia Civil, pero nadie la encontrará publicada en el BOE o anunciada en google. Y, como siempre, el gran perdedor de todo esto es el ciudadano que, un momento de crisis económica, donde ya se ven los primeros brotes verdes de una delincuencia en aumento, se encontraran con menos miembros del Cuerpo en la calle para servirles, mientras que la Administración aumenta su guardia pretoriana (Generales y miembros de la ESO en general).