lunes, 17 de agosto de 2009

Los gozos y las sombras

Estado de la cuestión de la integración de las Escalas de Oficiales de la Guardia Civil, según la Comisión de Oficiales de AUGC

Cuando hace unos meses pusieron ante AUGC el borrador de la nueva Ley de Personal del Cuerpo nuestra frustración no podía ser mayor: lo que se proyectaba para la integración de las escalas de oficiales era frustrante. Bueno, podía haberlo sido, unos meses antes había corrido un borrador apócrifo que, sin duda era bastante peor.

Sin embargo en las negociaciones del grupo de trabajo, aunque no hemos conseguido todo lo que se pretendía, se han alcanzado logros. Las pretensiones buscadas no eran otras que las resultantes de aplicar un razonamiento lógico y legítimo de las pretensiones de unas escalas de oficiales que durante décadas han estado ciertamente discriminadas, unos objetivos en modo alguno maximalistas.

Cuando nos sentábamos por primera vez a la mesa de ese grupo de trabajo nos encontrábamos el siguiente proyecto:

  1. Creación de una nueva escala de oficiales en la que los únicos que pasarían a integrarla de forma automática eran los de la escala superior de oficiales.
  2. Las otras 3 escalas sólo se integrarían cuando alcanzarán el empleo de Capitán.
  3. Hasta que se produjera la integración el ascenso a Teniente o Capitán se seguirían produciendo con la misma asimetría que la última década, por lo que los oficiales tendrían que esperar al menos 12 años para integrarse en la nueva escala única
    1. Las otras 3 escalas sólo se integrarían tras la superación de un curso que:
      • Sólo podría realizarse una vez.
      • Estaba claramente pensado para desanimar a esas 3 escalas, la mayor parte de los oficiales del Cuerpo a integrarse.
      • Del curso previsto corrió un borrador que no podía ser más infamante. Afortunadamente la cúpula de la Subdirección de Personal, no sólo ha manifestado que dicho borrador no procedía de ese órgano, sino que se estaba investigando quien había producido una alarma que incluso podía alcanzar matices de delictivo (los que hablan inglés en la intimidad pueden hacerlo un poco menos a partir de ahora).
  4. En ningún caso se preveía algún tipo de disposición transitoria que mermara la injusticia prolongada con las escalas de Oficiales y las de los Técnicos.

Hicieron falta al menos 4 reuniones para arañar poco a poco una serie de matices que se aproximaran un poco a lo que se prometía en el programa electoral de la Comisión de Oficiales de AUGC. Tras la última se pueden sintetizar los compromisos alcanzados con Personal (Subdirección a la que hay que reconocerle su talante negociador) en estos puntos:

  1. Integración de las 4 escalas en la nueva escala única. Estaba previsto en el primer borrador, la mejora viene en el matiz, porque la Subdirección General de Personal apuesta, clara y sinceramente, porque la integración sea universal, o al menos, lo más mayoritaria posible.
  2. Alféreces con 3 años antigüedad ascienden a Tenientes. Ya figuraba en el primer borrador y constituye un mal menor, asumible sólo en cuanto hay que considerarlo como la fórmula transitoria que consiga la transición menos traumática posible a la escala única
  3. Alféreces pasan a A-1 automáticamente. Como fórmula paliativa que propicie que este sector de la oficialidad NO continúe en la situación de discriminación anterior. No obstante en este logro arrancado es preciso estar vigilantes, esperando que esta mejora se refleje en sueldo, trienios, pero también en los complementos.
  4. Integración desde Tenientes. Otro logro. Ya no será preciso llegar a Capitán para integrarse en la nueva escala única. En el peor de los casos habrá que esperar tener 3 años de antigüedad como oficial para poder acceder a la nueva escala.
  5. Curso de integración. Sin duda ésta es la sombra. Después de apelar a argumentos economicistas (el coste del curso), académicas (los nuevos planteamientos en las titulaciones del EEES), utilitaristas (la mayor parte del personal asistente continuará ejerciendo las mismas funciones con las mismas capacitaciones que antes),… o proponiendo alternativas, como la realización de un curso de actualización o reciclaje con motivo de un cambio a un destino en el que se realicen funciones diferentes,… Nada ha servido, la Subdirección no ha accedido a la integración sin curso.
    1. Se han obtenido ciertos compromisos, como:
      • Promesas de reducirlo al mínimo. Sobre 60 créditos que en parte serían convalidables con
        1. Títulos.
        2. Cursos.
        3. Experiencia de mando,...
      • El curso ha de tener fecha de caducidad, es decir, ponerle un plazo máximo para realizarlo. Ha de ser la Dirección la que ha de arbitrar los medios para que todo el que lo desee pueda realizarlo en ese plazo.
      • Posibilidad de repetirlo, de renunciar o no acudir aunque no sea causa de fuerza mayor.
    2. Compromisos que no nos son suficientes. Intentaremos que el curso de integración como requisito previo a la integración sea eliminado y sustituído por esa alternativa de cursos de actualización o reciclaje con motivo de un cambio de destino a unidades y funciones radicalmente distintas de las que habitualmente se han desempeñado:
      • Luchando por ello en los foros adecuados y competentes.
      • Apelando a los argumentos que comentábamos anteriormente.
  6. Ascenso a Capitán por antigüedad en el empleo. Esto afectaría a todos los oficiales del Cuerpo, porque estamos hablando ya de la escala única. Después de un gran esfuerzo negociador se ha conseguido que la mayoría de los Tenientes ascenderán a Capitán cuando cumplan 5 años de antigüedad en el empleo.
  7. Ascenso a Comandante de los Capitanes con más de 8 años en empleo, en el momento de su pase a la reserva (el resto ascenderá con arreglo a los nuevos criterios de la escala única). Esos 8 años podrán ser perfeccionables estando en Reserva y, por supuesto, será con efectos económicos.

Sin duda algunos pensarán que lo conseguido no es demasiado, si lo hacen es porque no son conscientes que se trataba de la Ley de Personal y dentro de ella conseguir la integración más justa posible. Nos quedan objetivos en ese terreno y se conseguirán, de la misma forma que se ha conseguido una unificación bastante equitativa, por la que muy pocos apostaban.

Ello no es óbice para recordaros que ya estamos embarcados en nuevos grupos de trabajo y negociaciones para mejorar la situación socio-laboral del personal del Cuerpo en general y de los oficiales en particular: convenios con universidades sobre convalidaciones y titulaciones adecuadas o incluso creadas ad-hoc para los oficiales del Cuerpo, medidas sobre conciliación familiar en horarios de servicio, vacaciones y días libres, revisión del catálogo de puestos de trabajo en el que serán definidas funciones y complementos salariales que le atañen,…

Hay mucho trabajo por hacer y tenemos que hacerlo, desde las asociaciones y desde el trabajo diario tan profesional y abnegado como siempre han hecho los miembros del Cuerpo. Y hay que hacerlo, entre otras cosas, porque la Guardia Civil ha de cubrir el camino de los 2 últimos siglos en la primera década del XXI, al menos ese es el compromiso de la Comisión de Oficiales de la Guardia Civil.

Qué hay de lo nuestro??

Casi 2 meses de silencio a lo largo de los cuales hemos estado realizando una labor de negociación, silenciosa pero fructífera.

No podía ser de otra forma, este tipo de negociación ha de llevarse en silencio para lograr algún resultado.

En las próximas entradas te explicamos el antes y el después, como esta el proceso y que esperamos y porque vamos a luchar en adelante.